Cuáles son las habilidades que un Auditor interno debe perfeccionar

Dado que muchos auditores centran su atención en el valor que aportan a sus empresas y clientes en estos tiempos de incertidumbre económica, sería útil definir qué habilidades de auditoría interna aportarán más valor a la profesión, mientras la economía mundial avanza hacia lo que pesamos será una lenta recuperación.

 

Las habilidades son muy importantes

Lo positivo para los auditores es que, a pesar del uso cada vez extendido de la inteligencia artificial (IA) en la auditoría para realizar tareas basadas en decisiones, que anteriormente se dejaban en manos humanas, y a pesar de la automatización de las tareas repetitivas y la entrada de datos, tendrán más tiempo para aplicar sus conocimientos especializados y habilidades creativas a la resolución de problemas, destrezas que no pueden reproducir los algoritmos.

En la crisis global que estamos atravesando actualmente, organizaciones de todos los tamaños prestan todavía más atención a sus gastos. Dependerán de auditores especializados o incluso expertos que les ayuden a navegar las aguas difíciles que se avecinan.

En estos tiempos de incertidumbre económica, es un buen momento para hacer un balance de nuestras habilidades y ver qué necesitamos pulir o actualizar para ser indispensables en nuestra profesión.

Si bien hay una serie de cualidades esenciales que describen al auditor de alto rendimiento, existen tres habilidades que a nuestro parecer son críticas para mostrar su auténtico valor agregado en los próximos años.

 

1. Facilidad de uso y adaptabilidad con tecnología

Hoy en día, si está en contra de la tecnología, la auditoría no es su campo. Sentirse cómodo con tecnología de recopilación y procesamiento de datos es la entrada a la profesión de auditor. Su trabajo depende cada vez más de la tecnología y para destacar en la nueva economía, que ya está dominada por los que nacieron en la era digital, debe sentirse cómodo usando la tecnología y debe estar listo para cambiar y adaptarse a medida que se incorporan nuevas tecnologías a su flujo de trabajo. Para analizar los datos de una manera efectiva, debe conocer bien a sus clientes y las herramientas que usan para recopilar y almacenar datos.

Si necesita un repaso tecnológico, afortunadamente, hay más recursos y ayuda disponible que nunca para ponerse al día, tanto en Internet como a través de su propio departamento de recursos humanos.

 

2. Escepticismo profesional

Conocido también como «escepticismo sano», se refiere a la idea de que el pensamiento escéptico adecuado conduce a los mejores auditores a reconocer y superar los sesgos al emitir juicios relacionados con su trabajo. Los auditores con este tipo de enfoque crítico en su función evitan los atajos y están dispuestos a esforzarse al máximo para volver a evaluar los hallazgos si algo simplemente no cuadra y hacen preguntas a los clientes de una manera objetiva y constructiva.

Con el aumento de la inteligencia artificial y otras formas de automatización en la auditoría, la demanda de este tipo de análisis experto y juicio escéptico de los auditores no hará más que crecer.

 

3. Comunicación efectiva

Buenas dotes de comunicación, altamente valoradas, pero poco comunes, siguen siendo la cualidad central que se busca del profesional de la contabilidad. ¿En qué consiste tener buenas dotes de comunicación? Consiste principalmente en tener la capacidad de transmitir claramente pensamientos, ideas y sugerencias durante reuniones, presentaciones, entrevistas y negociaciones con clientes y ejecutivos. Estos clientes calificaron recientemente las dotes de comunicación (66%) como una cualidad casi tan importante como las habilidades técnicas (67%), una señal clara de que habrá demanda en el futuro.

Pero no piense que se trata solo de la comunicación verbal. La importancia de la comunicación no verbal, el trabajo en equipo y las dotes de presentación de información juegan un papel importante, y según una encuesta, buenas dotes de presentación producen mejores resultados profesionales.